La compañía Apple está dispuesta, una vez más, a demostrar su compromiso con el medio ambiente.
Hace unos meses pudimos verlo en su informe sobre responsabilidad medioambiental, donde hacían pública su intención futura de fabricar todos sus productos a partir de recursos renovables o materiales reciclados.
Ahora, Apple ha publicado un nuevo documento referido específicamente a su nuevo iPhone X. En dicho informe, la compañía hace hincapié en que toda empresa que se declare defensora del medio ambiente ha de empezar por fabricar dispositivos lo menos contaminantes posible.
Y, en ese sentido, señala a su nuevo iPhone X como el que menos contamina de su gama y el más reciclable.
En palabras de la compañía: “La cuidadosa gestión ambiental de nuestros productos a lo largo de su ciclo de vida incluye el control de la cantidad y los tipos de materiales utilizados en su fabricación, mejorando su eficiencia energética y diseñándolos para una mejor capacidad de reciclaje”.
Apple prevé que a lo largo de toda su vida el iPhone X producirá 79 kilogramos de dióxido de carbono, con el 80% generado durante su producción, el 17% en las necesidades energéticas por el consumo, el 2% por el transporte y 1% por el reciclaje.
Al igual que otros modelos, el iPhone X está libre de berilio y su pantalla ha sido fabricada en vidrio sin arsénico.
Asimismo, el smartphone carece de retardantes de llama bromados (compuestos organobromados que tienen un efecto inhibidor en la combustión de materiales orgánicos), mercurio y cloruro de polivinilo.
Por otro lado, la caja del dispositivo procede en su totalidad de materiales reciclados como bambú, papel o caña de azúcar residual.