Ya hemos escuchado lo que Apple quería decirnos, y ahora es momento de que lo hagan los benchmarks. Las cifras ofrecidas por Apple de que ofrecen “rendimiento tres veces mejor” y que son “mejores que el 98 % de los portátiles Windows vendidos los últimos 12 meses” puede que sean correctas si se dan ciertas restricciones, pero ahora los nuevos Macs con M1 han probado todo su potencial en las primeras pruebas independientes.
Y para confirmar la afirmación de Apple: los nuevos ordenadores con SoCs basados en ARM son rápidos, muy rápidos.
El nuevo MacBook Air con M1 registró unos 1687 puntos en la prueba de un núcleo y 7433 puntos en el benchmark de múltiples núcleos en Geekbench. Si lo comparamos, un MacBook Pro de 16” de 2019 con Intel Core i9 consiguió 1096 y 6780 puntos respectivamente.
Si el nuevo portátil de entrada de Apple consigue superar el modelo de alta gama anterior, promete mucho.
Pero hay más. Incluso el Mac Pro en su configuración básica pierde en la prueba Geekbench de un único núcleo comparado con el nuevo MacBook Air por solo 1024 puntos. En la prueba de múltiples núcleos, el Mac Pro sigue a la cabeza con 7989 puntos.
Esperamos atentos los benchmarks del MacBook Pro de 13” con M1 y el Mac mini con M1 que, a diferencia del MacBook Air con M1, utiliza ventiladores y, así, pueden incluso llevarlo más allá. El SoC es el mismo a excepción de un núcleo de gráficos menos en el MacBook Air.
Artículos originales publicados en Macwelt.