Transcurridos los primeros meses del año, vemos cómo 2021 está siendo un año de sequía para Apple en lo que a lanzamiento de nuevos productos se refiere, en comparación al agitado año 2020, cuando la compañía llevó a cabo numerosos lanzamientos.
Durante el último trimestre de 2020, vimos como Apple lanzó el Apple Watch SE y el Series 6, el iPad Air, un HomePod mini, los iPhone 12 y toda su serie, así como los primeros equipos Macs con M1, sin olvidarnos del lanzamiento sorpresa de los AirPods Max en el mes de diciembre.
Naturalmente, llegamos a asumir que el ritmo continuaría con la llegada del nuevo año, con rumores sobre nuevos AirPods, iPads, AirTags, Apple TV y iMacs. Sin embargo, hasta el momento, ninguno de ellos ha sido anunciado, a la espera de lo que haga Apple el próximo 20 de abril.
Si echamos la mirada atrás, podemos llegar a la conclusión de que es la primera vez que Apple ha esperado tanto en lanzar un nuevo producto desde que comenzara el año. La última vez sucedió en 2014 con el anuncio de un nuevo iPad en el mes de marzo.
Dicho esto, ¿podría Apple estar tratando de generar expectación ante la llegada de algo nuevo que está en camino? No exactamente.
La disponibilidad de componentes está afectando a todas las marcas y sectores y esto podría afectar también al resto de productos que la compañía planea lanzar a lo largo del año, incluyendo la nueva familia de teléfonos iPhone 13.
Problemas de producción
Un informe reciente de Nikkei Asia confirma que existe una escasez de suministro a nivel mundial provocando retrasos en la producción de MacBooks y iPads, dos dispositivos que deberían haber sido presentados ya.
En particular, la escasez de pantallas y sus componentes habría afectado a la producción del iPad, mientras que en el caso de los MacBooks, el problema estaría más asociado a un problema relacionado con el montaje de componentes en placas de circuito impreso.
Según el informe, Apple habría tratado de impulsar la fabricación de ambos productos, que estaban programados para garantizar la disponibilidad y venta a lo largo de la primera mitad de 2021.
Con gran probabilidad se trataría de los MacBooks de 14 y 16 pulgadas, así como del iPad de 9,7 pulgadas, pero es casi seguro que los retrasos que afectan a estos modelos también han afectado al resto de productos que llegarán en 2021, incluidos los iPad Pro, que podrían ser el gran lanzamiento del mes de abril.
Y eso sin hablar de la escasez de chips, que ha sido un problema mundial durante muchos meses, afectando a todo, desde tarjetas gráficas, hasta automóviles y teléfonos inteligentes Android.
Este es el primer informe que leemos sobre cómo afecta a Apple, pero la compañía sin duda ha sentido los impactos durante meses. En primer lugar, en la línea de productos de otoño de Apple, que modificó sobre la marcha su período de lanzamientos habitual.
Luego le llegó el turno a los iPhone, cuyos lanzamientos y disponibilidad final llegó a producirse casi un mes después de lo habitual. Y finalmente, los AirPods Max que se agotaron casi al instante de ser lanzados y estuvieron sin stock durante meses.
Un informe de Bloomberg afirma que el nuevo iPad Pro también podría verse limitado. Mark Gurman, añade que los proveedores extranjeros de componentes de Apple están lidiando con tiempos de fabricación deficientes para la nueva pantalla mini LED, que, según se informa, será una de las actualizaciones clave del iPad Pro.
“Al menos uno de los fabricantes de pantallas Mini LED ha tenido que detener recientemente la producción por la falta de componentes”. Añade a esto las limitaciones de suministro, y los envíos del nuevo iPad Pro, el que sería el primer producto nuevo de Apple de este año 2021.
Ahora que la escasez de chips se ha recrudecido todavía más, estamos viendo retrasos más prolongados y notorios. La crisis de suministro se vio agravada por el carguero Ever Given que bloqueó durante días el Canal de Suez e interrumpió aún más la cadena de suministro.
La suma de todos estos inconvenientes no hacen otra cosa que empeorar la disponibilidad de productos de Apple en sus tiendas y en los puntos de venta.
Los eventos en fase de cambios
En cualquier caso, parece que nunca sabremos con certeza si Apple planeaba realizar un evento en marzo, o bien si el hecho de que fuera virtual les ha permitido manejar mejor las fechas de cara a tener una mayor flexibilidad a la hora de convocar.
Es muy posible que haya diversas presentaciones preparadas y Apple actúe en función de la disponibilidad que tenga de los productos, para no generar demanda entre los usuarios y luego no poder satisfacer o cumplir con los pedidos.
Los eventos virtuales también le permiten a Apple espaciar en el tiempo los lanzamientos para generar la máxima visibilidad. En un año normal, Apple nunca habría celebrado tres eventos el otoño pasado, pero con las conferencias magistrales online, los eventos se pueden reprogramar en cualquier momento.
En años anteriores, Apple pudo haber realizado un evento y enviado productos semanas después, pero ahora puede esperar tanto como sea necesario. Esperar también ayuda a generar anticipación, que es una especie de arma de doble filo.
Cuanto más espere la gente, mayores serán las expectativas y más fácil será decepcionarse. Hay una razón por la que a Apple le gusta espaciar los lanzamientos de sus productos y si llegan nuevos iPads la semana que viene, supongo que no habrá un evento de renombre hasta la WWDC 2021.
Las miradas puestas en el iPhone
Nikkei Asia informa que los iPhones “hasta ahora no se han visto afectados por la escasez de suministro”, pero también dice que la provisión de algunos componentes son “bastante escasos”.
Eso podría significar otro ligero retraso en el lanzamiento de los iPhone 13 con su correspondiente movimiento de fecha al mes de octubre, con envíos escalonados para ayudar a aliviar las limitaciones de suministro.
Pero también podría ser mucho peor. No hay indicios de que la escasez de chips esté mejorando. GM y Ford acaban de detener la producción en varias fábricas debido a la escasez de chips y parece que Google ha cancelado la del Pixel 5a hasta finales de año.
Apple podría verse en la vicisitud de tener que priorizar cosas, como es el caso del chip A15 presente en los iPhone 13 para salvar las ventas del último trimestre del año. Eso podría significar que algunos Mac M1 que deberían llegar en 2021, no lo hagan hasta 2022.
Aunque hemos tenido que esperar algo más de tiempo para presenciar este primer lanzamiento de Apple de 2021, parece que la disponibilidad final de los nuevos iPad Pro no llegará a corto plazo.
El año no ha hecho más que comenzar y parece que no será nada fácil para las compañías tecnológicas. En el caso de Apple no iba a ser menos.