No hay ninguna duda de que el nuevo iMac de 24” con M1 es un equipo increíble. Una espectacular actualización respecto a la generación previa, finalmente le da mucha emoción a la gama de ordenadores de sobremesa de Apple y establece lo que será el iMac en los próximos años.
Pero Apple no puede pasar otra década sin hacer grandes cambios en su nuevo modelo. Aunque recomendamos totalmente comprar uno ahora mismo por encima de cualquier otro iMac, el nuevo modelo no está a la altura de nuestras expectativas.
Estas son cinco razones por las que el iMac de 24” sigue quedándose corto.
El chip M1 solo está bien
Como era de esperar, el nuevo iMac recibió una dosis del chip de Apple, y no tenemos ninguna duda que será increíblemente rápido, especialmente comparado con el modelo anterior con Intel Core i3.
Pero mientras esperábamos que se actualizara el sistema en chip con más RAM y más velocidades, tenemos el mismo chip M1 que en los MacBooks, con opciones de GPU con 7 y 8 núcleos. Puede que sea suficiente para estos iMacs, pero Apple necesitará un procesador y unos gráficos más potentes, sin mencionar la memoria, en los iMacs de alta gama.
La pantalla no es ajustable
La pantalla Retina 4,5K del iMac con M1 es, sin duda, excelente, con una gama cromática amplia P3, 500 nits de brillo, True Tone y una capa antirreflejante. Resultará increíble para ver películas, editar vídeos y mirarla durante horas y horas.
El problema que tenemos es con su ajuste. Como los antiguos iMacs, puedes ajustar la pantalla para encontrar el ángulo de visión óptimo, pero no puedes elevarla o bajarla para que esté a la misma altura de tu escritorio.
Esta era una gran limitación del iMac antiguo (y que naciera la industria de elevadores y soportes) y no podemos creer que Apple lo haya vuelto a hacer.
No tiene una prestación determinante
El iMac con M1 es sin duda un buen ordenador, pero no hace nada que no pueda hacer el modelo anterior. El cable de alimentación magnético es un buen detalle, pero no añade nada a la experiencia.
Nos hubiera gustado que hubiera un factor sorpresa (una base de carga inalámbrica instalada, una pantalla extraíble, compatibilidad con Apple Pencil) haciendo que un equipo que queremos sea uno que necesitemos.
El iMac con M1 es sin duda un buen equipo, pero cuando lo analizas bien, es simplemente un iMac.
El diseño no va más allá
Con un primer vistazo, el iMac llama la atención. Los colores, los biseles delgados, el estético mínimo son muy bonitos, pero cuando das un paso atrás, no es tan diferente al modelo que reemplaza.
Nuestro gran pero es la barbilla. Apple ha fabricado un iMac muy delgado (de solo 11,5 mm), pero sigue necesitando disponer la placa base debajo de la pantalla. Así, mientras hay menos espacio vacío y es más colorido, sigue habiendo una barbilla debajo de la pantalla, esta vez sin el logo de Apple.
Y ya que estamos, no entendemos por qué Apple ha optado por unos biseles blancos que distraen tanto y no por los negros.
Te puede interesar: Por qué estoy decepcionada con el diseño del iMac de 24” de Apple.
Faltan puertos
Apple ha emprendido una cruzada contra los puertos en el iPhone y el MacBook, y ahora ha llegado también al iMac. No obstante, aunque entendemos por qué Apple quiere eliminar puertos de sus dispositivos portátiles para hacerlos más delgados y ligeros, no tiene mucho sentido en el iMac. Pero Apple lo ha hecho igual.
El modelo anterior tenía cuatro puertos Thunderbolt 3 (USB-C), cuatro puertos USB-A, Gigabit Ethernet y una ranura para tarjetas SDXC, pero el nuevo modelo solo tiene dos o cuatro puertos USB-C, con Ethernet incluido en el cargado en los modelos más avanzados.
Eso significa que necesitas un hub o dongle para conectar cualquier accesorio, algo que no tendría que ser necesario.
No tiene Face ID
Hace años que queríamos ver Touch ID en el Magic Keyboard, y nos gusta ver que ha llegado al iMac (y esperemos que Apple nos deje pronto comprar uno por separado). Pero no podemos evitar ver esto como una oportunidad perdida para traer al Mac una autenticación biométrica más sencilla y segura.
Cuando supimos que el iMac tendría una cámara frontal de 1080p mejorada, estábamos seguros que tendríamos una cámara TrueDepth para Face ID, pero no: seguimos esperando que llegue a un dispositivo que no sea iOS.
Artículo original publicado en Macworld US.