Puede que Chris Evans haya ayudado a salvar el mundo como Capitán América en Vengadores: Endgame, pero, en la vida real, no pudo salvar su fiel iPhone 6s.
En una entrevista con Collider para promocionar su nueva película de Netflix The Gray Man, Evans comparte cómo se siente con su nuevo iPhone 12 Pro, y no parece que le quiera mucho. Para empezar, al héroe que consigue levantar el Mjölnir, le cuesta sostenerlo.
“Siento que mi nuevo teléfono es demasiado pesado. Sé que eso me convierte en el dinosaurio más viejo del mundo, pero el problema es que… usas el meñique para sujetarlo y se siente demasiado pesado”, dice Evans.
No esperáramos escuchar esa queja de uno de los Vengadores más fuertes, pero la vida no siempre es como en las películas. Y hay más: a Evans no le gusta la navegación por gestos. Viniendo de un iPhone 6s, que era un teléfono decente allá por 2015, Evans echa de menos el clásico sensor Touch ID bajo la pantalla: “¿Echo de menos el botón de Inicio? Sí, lo echo de menos”.
No dice si le gusta alguno de los mejores aspectos de su nuevo iPhone, que compró a finales de junio. Pero suponemos que aprecia la mejor cámara, la mayor duración de la batería y la pantalla más grande.
Tampoco dice por qué optó por un iPhone 12 en lugar de un iPhone 13 más nuevo, pero una cosa está clara: no comprará un iPhone SE, a pesar de que eso supuestamente resolvería todas sus quejas.
“Hay muchas personas que me dicen: ‘¡Cómprate el SE!’. Yo digo que no, que no quiero… Quiero el iPhone 6[s]. Quiero que algo de antes funcione hasta que deje de funcionar”, sigue.
No sabemos muy bien qué quiere decir eso, ya que el iPhone SE es un iPhone 6s, solo que con mejores piezas internas. Quizá no sepa exactamente qué es el iPhone SE. O tal vez, como el Capitán América, Evans simplemente está atrapado en el pasado.
Artículo original publicado en Macworld.com.